SI ALGUNO OYE MI VOZ

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; SI ALGUNO OYE MI VOZ y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi padre en su trono.

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¿Oh Señor!

Hoy quiero suplicarte perdón por mis pecados y pedirte:
La nobleza de Abel
La obediencia de Enoc
La confianza de Noé
La fe de Abraham
La bendición de Isaac
La perseverancia de Jacob
La fidelidad de José
La pasión de Moisés
El optimismo de Josué
La seguridad de Caleb
El amor de David por tí
La sabiduría de Salomón
La paciencia de Job
La resistencia de Pablo
La osadía de tus apóstoles...
y sobre todo...
La santidad de Cristo.

Amén



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¿Cuál es tu hobby cristiano?

Santiago 16: 15-16 dice: "Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.

El que creyere y fuere bautizado, será salvo; más el que no creyere, será condenado".

¿Quieres ser salvo? Si tu respuesta es afirmativa, sólo debes cumplir estos requisitos que te enumero:

1. Recibe a Cristo en tu corazón mediante una oración de fé, para que a través de su Santo Espíritu, venga a morar en tí.

2. Escudriña y estudia diariamente su palabra a través de la biblia, para conocerle con profundidad, complementando con las enseñanzas de otras personas que tienen esta experiencia.

3. Apartate de pecado. Una vez hemos recibido a Cristo como salvador, él nos promete borrar nuestros pecados acumulados, y nos hace nuevas criaturas, depositando en nosotros un nuevo espíritu, susceptible a su voz.

4. Cumple la ley, la que se resume en dos grandes mandamientos: Amar a Dios sobre todas las cosas y amar a tu hermano como a tí mismo.


ORACIÓN DE FÉ

Señor Jesús: Hoy, te recibo como mi único y suficiente salvador. Abro mi corazón para que entres en él y comiences a reinar en mi vida. Para que seas el Amo y Señor de mi vida. Me arrepiento sinceramente de haberte ofendido. Te pido que perdones mis pecados, que me limpies con tu sangre preciosa, y me hagas una nueva persona, obediente a tí. Escribe mi nombre en el libro de la vida y bórralo del libro de la condenación. Gracias por morir en la crúz por mí. Amén






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